Hidatidosis en el extremo sur de Chile

Hidatidosis en el extremo sur de Chile


Columna de opinión de Dra. Denisse Ormazabal, coordinadora Comisión Bienestar Animal del Consejo Regional de Magallanes del Colegio Médico Veterinario de Chile

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En la actualidad existe una mayor preocupación y conocimiento sobre las zoonosis, que se definen como enfermedades infecciosas transmitidas de los animales a los seres humanos. La transmisión ocurre a través de la exposición directa o indirecta a los animales o productos derivados como la leche, carne o huevos; y relacionados al entorno como el agua o verduras por ejemplo. Cabe destacar que las infecciones y enfermedades son producidas por un agente etiológico (bacterias, virus, hongos y/o parásitos) que se encuentran diseminados en todo el mundo y representan un alto porcentaje de enfermedades que afectan al ser humano.

El estrecho contacto que existe entre personas y animales, tanto domésticos como salvajes, ya sea por compañía o por actividades laborales como en zoológicos o santuarios de animales entre otros, es que existe una mayor posibilidad que las enfermedades de animales sean transmitidas a los humanos. Según la Organización Mundial de Sanidad Animal (OIE) un 60% de las enfermedades infecciosas humanas conocidas son de origen animal.

De acuerdo a lo mencionado anteriormente es que parece importante mencionar el concepto “One Health” o Una Sola Salud, la que indica la cercana relación que existe entre la salud humana y salud animal, que a su vez coexisten en un ecosistema en común. Cabe destacar que el nivel de estabilidad que posea un ecosistema es la clave para conservar todo un entorno saludable, y que tanto los hábitats como ciclos biológicos de cada especie estén en equilibrio. Situación que lamentablemente no ocurre en la actualidad ya que por la gran expansión de la población, deforestación, contaminación de aguas entre otros, es que ha dado cabida al aumento de prevalencia de zoonosis.

En la región de Magallanes existe una gran actividad ganadera ligada a la producción ovina extensiva, la que se realiza en campo abierto, sin estabular a los animales. Es por esto que tanto en comunas rurales como periurbanas existen faenamientos para autoconsumo como parte de una tradición y costumbre del extremo sur.

Una de la zoonosis relacionada con la actividad ganadera es la Hidatidosis, la que presentó una tasa de 127.6 en la región de Aysén, 28.4 en la región de Ñuble y 25.6 en la región de Magallanes, según índices obtenidos el año 2021 en la plataforma MINSAL del Departamento de Epidemiología.

La enfermedad es producida por un parásito llamado Echinococcus granulosus, principal responsable de la equinococosis quística en humanos y que transmite el perro a través de su materia fecal. Cuando el perro infectado elimina sus heces, salen también miles de huevos del parásito contaminando praderas, agua, verduras e incluso pueden quedar adheridos al pelaje del can. Luego las ovejas consumen los huevos del agua y/o pasto, y en sus órganos se forman quistes. En caso de que el canino sea alimentado con estas vísceras contaminadas, se forman nuevamente estos parásitos y el ciclo continúa. Pero este ciclo se puede prevenir por completo cumpliendo las siguientes recomendaciones: no alimentar a los perros con vísceras, desparasitar a los perros cada 45 días, lavarse profusamente las manos luego de estar en contacto con animales, y lavar frutas y verduras antes de consumir.

En Magallanes es una práctica que sigue arraigada en una parte de la población, el entregar vísceras crudas a los perros luego de faenar para autoconsumo en los sectores rurales y periurbanos, sin embargo la educación en tenencia responsable de mascotas en las escuelas y a la comunidad en general se hace de vital importancia por parte de las instituciones públicas y privadas, para mejorar el conocimiento de los propietarios y el bienestar de sus animales.

Foto: Cristian Morales / www.indap.gob.cl


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